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La Web 2.0 en el Aula: Nuevas Formas de Aprender y Compartir Conocimiento

Se examina el impacto de las Tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en la sociedad contemporánea, destacando su influencia en los ámbitos social, cultural y económico. Se presta especial atención a la transformación del perfil del docente en el siglo XXI, quien ahora debe poseer un conjunto diverso de competencias relacionadas con las herramientas tecnológicas emergentes, particularmente aquellas asociadas a la Web 2.0.

La Web 2.0, caracterizada por su capacidad para facilitar la colaboración y el intercambio dinámico de información, incluye plataformas como redes sociales, blogs y wikis. Su estructura se fundamenta en tres pilares esenciales: la tecnología, la comunidad y el negocio. A diferencia de la Web 1.0, donde la producción de contenido era limitada a unos pocos, la Web 2.0 permite que cualquier usuario con conocimientos básicos y acceso a una computadora pueda generar y compartir información, transformando así la creación y el consumo de contenido en un proceso tanto individual como colaborativo. Esto potencia la interacción social y tecnológica entre los usuarios.

La implementación de la Web 2.0 en el ámbito educativo promueve un enfoque constructivista del aprendizaje, en el que el estudiante asume un papel activo en su proceso de aprendizaje. Entre las características sobresalientes de estas aplicaciones se encuentra su capacidad para fomentar el trabajo en equipo, la resolución de problemas y la toma de decisiones en conjunto. El "Aprendizaje 2.0" se basa en dos principios fundamentales: la generación de contenido por parte del usuario y la arquitectura de participación, lo que propicia un conocimiento que es intercambiable, acumulativo y colaborativo.

Se identifican cuatro modalidades de aprendizaje 2.0: aprender haciendo (creando contenido), aprender interactuando (a través de chats o foros), aprender buscando (investigando y seleccionando información) y aprender compartiendo (intercambiando conocimientos y experiencias). Estas herramientas no solo mejoran la gestión de la información, sino que también fomentan la creación de redes de conocimiento basadas en la cooperación entre usuarios, lo que implica la necesidad de desarrollar nuevas habilidades tanto en estudiantes como en docentes.